Autor: Knut Hamsun.
Editorial: Ediciones de la Torre. Biblioteca Nórdica.
Págs: 200.
Sinopsis: Recuperamos para el lector español la obra cumbre de este gran escritor noruego, marcado por la tragedia personal, ideológica y política. El protagonista de 'Hambre' no tiene nombre, no tiene edad, no se sabe nada de su origen o de su familia. Es un hombre sin pasado, arrancado, como una planta, de su contexto y lanzado al anonimato y la hostilidad de la gran ciudad.
Opinión personal: Una historia durísima pero también muy bella sobre un escritor hambriento que se bate entre la vida y la muerte con tal de seguir escribiendo. Hamsun me ha parecido un escritor extraordinario. Poco más que añadir, sólo que lo leáis.
Como dato curioso decir que Knut Hamsun tuvo una influencia importante en escritores de la talla de Thomas Mann, Henry Miller, Herman Hesse y Stefan Zweig. Mi libro favorito de este año. Muy recomendable.
"Habría sido distinto si la hubiera conocido cuando aún tenía aspecto de ser humano."
"No me quedaba ni siquiera un peine o un libro que leer cuando todo se volvía demasiado triste."
"(...) Por entonces no tenía ideas tristes. Olvidé mi miseria y me sentí sosegado a la vista del puerto, apacible y bello en la semioscuridad."
"La adversidad había tomado la delantera y había sido muy ruda; yo estaba extraordinariamente destrozado, no era más que la sombra de lo que había sido."
"Estaba a punto de llorar de pena por estar aún en la vida."
"He hecho un intento de escribir… un libro sobre las delicadas oscilaciones de una vulnerable alma humana, sobre esa extraña vida de la mente, sobre los misterios de los nervios en un cuerpo consumido por el hambre.”
"Yo no sentí ningún dolor; el hambre me habia embotado la sensibilidad; por el contrario, me sentí deliciosamente vacío, sin ningún contacto con lo que me rodeaba, y feliz por no ser visto de nadie. Extendí las piernas sobre el banco y me volví hacia atrás; así podría sentir mejor todo el bienestar de la separación. No había ni una nube en mi alma, ninguna sensación de malestar y, tan lejos como podía llegar mi pensamiento, no envidiaba nada, no tenía ni un deseo insatisfecho. Estaba tumbado con los ojos abiertos, en un estado singular; estaba ausente de mí mismo, me sentí deliciosamente lejano.”
Puntuación: 5⭐/5
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